El Debate II

Ya han terminado los dos debates, y al parecer si que había mucha menos expectación porque la audiencia fue de un millón menos de espectadores. Supongo que se esperaba un poco más de lo mismo. Y hubo más de lo mismo, pero también más propuestas aunque solo de un bando. El otro bando pocas propuestas, solo erosión y crispación, ese es su discurso, no me extraña que en todos los sondeos lo den como perdedor. La niña se perfila como sucesora.

Cuando en vez de tratar a tu oponente como adversario lo tratas como enemigo, te retratas, y eso es lo que pasó. En fin, está claro quien será nuestro próximo presidente del Gobierno. Yo al menos lo vi claro desde el debate Solbes-Pizarro. Hasta ese momento tenía dudas, porque la economía la veo crucial. Pero desde ese debate el globo de Pizarro se pinchó y el camino quedó despejado.

Con respecto a las elecciones Conferencia Episcopal, ya ha salido un ganador Super Rouco, bien, otro que trata a sus adversarios como enemigos a machacar. No sé, no me cae bien, viéndole la cara ya me parece perverso, malo, de poca confianza. A mi un cura, me da confianza viéndole la cara, y este me inspira maldad. Me inspiraba ternura Juan Pablo II; Rouco y Radzinguer me inspiran intranquilidad y distanciamiento.